excelente acceso a parques y paisajes impresionantes cercanos a la ciudad

Me encantó la atención del personal, siempre listos para ayudar, y la increíble vista desde mi habitación que hacía que cada mañana fuera especial mientras exploraba lugares como el Puente de San Urbez, a solo 2 km, que se disfruta en menos de 5 minutos a pie, y el Mirador Canon Anisclo, un poco más lejos pero definitivamente vale la pena el recorrido. ideal para quienes disfrutan de caminatas por la ciudad y necesitan un lugar donde descansar tras un largo día.

No olvides preguntar sobre las rutas de senderismo cerca. el personal te puede dar excelentes recomendaciones.

Nuestra estancia fue muy agradable. Las vistas desde la terraza son espectaculares, especialmente al disfrutar del desayuno al aire libre. La atención del personal es excepcional, siempre dispuestos a ayudar y recomendarnos rutas a explorar. Las habitaciones son cómodas y ofrecen un ambiente tranquilo, perfecto para descansar tras nuestras aventuras diarias. Además, la cercanía a lugares como el Puente de San Urbez es un gran plus para quienes disfrutan del senderismo.

La comida en el bar era a veces un poco lenta en servicio.

Un lugar de ensueño en Buerba

La atención del personal es excepcional y siempre están dispuestos a ayudar. Las vistas desde la terraza mientras disfrutábamos del desayuno eran simplemente espectaculares.

Aunque el ruido del comedor puede ser incómodo en horas tempranas, nada impidió disfrutar de la estancia en este tranquilo rincón de la naturaleza.

Las vistas desde la habitación son espectaculares.

Mi experiencia estuvo marcada por varios inconvenientes. No hay suficiente variedad en el desayuno, lo que lo hace un poco aburrido después de un par de días. Además, el acceso al hotel es complicado, lleno de curvas que pueden resultar incómodas para algunos. noté que el servicio de limpieza de las habitaciones solo se realiza cada dos días, lo que puede ser un problema para quienes prefieren un espacio más ordenado.

A Atención excepcional
B Comida casera
C Vistas espectaculares

A Ruido del comedor
B Acceso complicado
C Equipamiento simple

la atención fue maravillosa, pero no entiendo por qué no había televisión en la habitación. recibir animales fue muy complicado, y para colmo, pensé que habría un pequeño regalo de bienvenida, pero claro, eso solo es para otros. si no lo sabías, así no se trata a un huésped especial. casi escribo una buena crítica, pero no pude.

El lugar es mágico y rústico, perfecto para desconectar. La vista y el aire fresco por la mañana son indescriptibles.

me sentí muy atendido, no tengo ninguna queja en absoluto

Un lloc tranquil, amb vistes espectaculars. Habitació còmoda i neta, i el menjar increïble, especialment l'albergínia! El servei de l'amo, un encant, sempre amb un somriure.

El servicio fue excelente y la comida deliciosa. El bar a veces estaba un poco lleno.

La experiencia fue buena, especialmente las cenas en la terraza, disfrutando del paisaje mientras saboreaba platos caseros. La atención del personal me hizo sentir bienvenido. Me gustó caminar por la montaña y respirar aire fresco, perfecto para desconectar. Lo que más destacó fue el trato cercano, siempre dispuestos a ayudar. La vista desde la habitación fue un plus.

El acceso complicado por las carreteras que no son anchas. A veces, se sentía un poco de ruido en la mañana.

una cena inesperada y deliciosa al llegar

gran comida, ambiente tranquilo

falta de opciones de cena cercanas

Las habitaciones son bastante cómodas y silenciosas, perfectas para descansar después de un día largo. La vista desde las ventanas ofrece un paisaje espectacular que sinceramente no esperábamos.

El desayuno es un poco escaso y las habitaciones solo se hacen cada dos días, lo que puede ser desagradable para algunos. No hay champú ni gel de ducha disponibles, lo que significa que hay que pedirlos en recepción, y además, la falta de televisión puede dejar a algunos sin opciones de entretenimiento.

Yolanda y Rubén brindan un trato excepcional, siempre atentos a nuestras necesidades y las de nuestros perros. Las habitaciones son cómodas, perfectas para descansar después de un día de exploración. La comida europea que sirven es deliciosa, especialmente los desayunos. realmente se nota la calidad. Sin embargo, podría mejorar la disponibilidad de productos de baño en las habitaciones, y el silencio del lugar es interrumpido ocasionalmente por las actividades al aire libre.

La tranquilidad, la atención del personal, el jardín fueron simplemente excepcionales.